Otro día. Otro amanecer. Otra esperanza rota de que todo lo que había pasado entre Benjamin y Alyse no fuera mas que una pesadilla de mal gusto.
Alyse. Benjamin. Dos personas totalmente distinas que se habían unido en una noche de pasión prohibida, dos personas que se habian unido en una noche de locura, dos personas que se habian unido para cometer el mas grande error de sus vidas.
Esa noche que habia tenido grandes y malas consecuencias en la vida de los dos, bueno, que estaba en camino de tener grandes consecuencias ya que ninguno habia dicho ni una sola palabra acerca de esa inolvidable noche.
Aunque hay veces en las que es mejor tratar de ignorar las cosas, borrarlas de la mente, hacer como si nunca hubieran pasado simplemente para poder vivir tranquilamente. Por lo menos así lo hicieron Alyse y Benjamin. Ellos ignoraron lo que había pasado el fin de semana anterior, aunque ¿como ignorar algo que marco tu vida para siempre? Bueno, por lo menos en el caso de Alyse, ¿como ignorar su primera vez? Alyse lo intentaba, pero no lo lograba, pensaba en ello cada segundo del dia. Simplemente habia sido algo maravilloso, tenia que admitirlo, habia sido la primera vez en su vida en la que habia echo algo loco espontaneo, simplemente disfruto de su libertad por unas horas, aunque eso no cambiaba en nada la verdad, lo que habian echo estuvo mal. Alyse habia engañado a Spencer, su novio, el chico que la amaba. Benjamin habia engañado a su esposa, Camille, la habia engañado con una chica de 16 años, y peor aun, se habia acostado con una de sus alumnas, habia roto todos los codigos eticos que existian, habia roto todos los codigos morales, habia cometido el peor error de su vida, el sabia que si alguien se enterraba de lo que habia pasado esa noche el estaria muerto, su esposa lo dejaria, lo despedirian, nunca nadie lo volveria a contratar, todos en este pueblo lo odiarian por aprovecharse de una incocente chica por lo tanto se tendria que mudar lejor, muy muy lejos.
- ¿Porque estas tan callada?- preguntó Spencer mientras conducía hacia el colegio de Leuven.
- Solo pienso- Alyse solo tenia una cosa en su mente desde Halloween, pero claro, no se lo podía decir a Spencer. Alyse lo miro y sonrió con amor, luego se acerco a a el y le dio un tierno beso en la mejilla. Se sentía demasiado mal por haberlo engañado, se sentía culpable, se sentía mala y sucia, aunque eso no quitaba que lo había disfrutado, lo había disfrutado mucho y eso la hacia sentirse peor.- Te quiero
Spencer la miro por unos segundos ya que no podía quitar su vista del camino, sonrió alegremente.
-Yo mas-
Alyse se sentía afortunada de tener a un hombre como Spencer a su lado, era un chico bueno, tierno, caballeroso, amigable, graciosos, respetuoso, atractivo, atlético y muchas muchas cosas mas. Spencer era uno de esos chicos casi perfectos que son muy difíciles de encontrar, esos que cumplen con todo lo que se pone en la lista del hombre perfecto. Aunque claro, nadie es perfecto, pero como novio Spencer lo era.
Llegaron al instituto, Spencer detuvo el auto en la entrada. Siempre dejaba a Alyse allí para que no llegara tarde esperando que el estacionara el auto. Alyse tomo su bolso y algunos libros que llevaba y abrió la puerta.
- Nos vemos en el almuerzo- dijo mientras le daba un rápido beso en los labios, luego salio apuradamente del auto y se encamino hacia su primera clase la cual era ingles irónicamente.
Alyse estaba nerviosa, No había visto a Benjamin desde esa noche, el profesor había faltado por una semana, Alyse no sabia el porque, pero lo suponía. Alyse no se acordaba mucho de la noche, todos sus recuerdos eran un poco borrosos, pero de lo que si se acordaba claramente era de lo que paso después. Ella y Benjamin se habían quedado dormidos en el piso, cuando Alyse se despertó se asusto ya que estaba desnuda junto a su profesor, por lo que rápidamente con mucho cuidado para no despertarlo se vistió con su disfraz de Halloween y se fue a su casa, por lo tanto no habían tenido la oportunidad de hablar sobrios del asunto. Con los que si había podido hablar era con sus padres, bueno, hablar era decir mucho ya que no la dejaron con todos sus gritos. Ellos estaban enojados, muy enojados, tanto que la habían castigado por lo que restaba del año, pero Alyse también estaba enojada, por lo que ellos habían echo, pero claro, como no la dejaron hablar no pudo reclamarles.
- Lo siento- dijo Alyse mientras entraba interrumpiendo la clase la cual acaba de comenzar.
- Pase- dijo el profesor Pollard evitando mirarla a los ojos.
Alyse paso y se sentó en el lugar de siempre , en la primera fila para poder poner atención, aunque en este momento eso era imposible, sin importar en que lugar se sentara.
- Bueno, primero que todo, quería disculparme por haber faltado esta semana.- dijo el mientras se recostaba contra su escritorio.
-¿Porque falto, profesor?- pregunto un alumna muy poco discreta. El profesor sonrió.
- Bueno, salí de la ciudad con mi esposa- Alyse sintió que se lo había dicho a ella, pudo ser paranoia, pero así lo sintió ella por lo tanto sintió un hueco en su estomago. Hasta ahora se daba cuenta de que gracias a ella Benjamin había engañado a su esposa, y eso no la hacia sentir mejor.- Pero, eso no importa. Bueno, supongo que hicieron su tarea y leyeron el libro que les deje como tarea ¿Cierto?- todos contestaron con un armonizado "Si". El profesor se estiro y saco del cajón del escritorio el libro "La letra escarlata". Alyse se inclino hacia su bolso y saco el mismo libro el cual ella no había tenido tiempo de leer, por lo tanto no sabia ni de que se trataba.
-Entonces, ¿quien me quiere decir de que se trata la historia?- normalmente Alyse seria la primera en levantar su mano, pero gracias su falta de tiempo para hacer la tarea tuvo que quedarse callada y mirar para otro lado para evitar que la escogieran.
- La historia se trata de una mujer que comete adulterio, por lo tanto es obligada a usar una letra "A" roja alrededor de su cuello como castigo.- dijo una chica que estaba sentada atrás.
- Exacto. La letra escarlata es una historia de la vergüenza y la humillación que le hacen pasar a una mujer, Hester Prynne, el personaje principal. Ella se embaraza y ya que hace mas de dos años que esta separada de su esposo todos creen que cometió adulterio, por lo tanto los magistrados la obligan a llevar una letra "a" escarlata en el canesú de su vestido para que todos sepan de su pecado.- explico rápidamente el profesor. Había una cierta ironía con esa historia y con la de Alyse y Benjamin. Una coincidencia muy rara que hizo que Alyse se sintiera mal.
Toda la clase se quedo callada, en espera de que el profesor siguiera. El suspiro.
- Les hice una pequeña guía y un resumen acerca de la historia, capitulo por capitulo, léanlo y luego responden las preguntas de la guía y la reviso la próxima clase.- El profesor saco un puño de hojas de su escritorio.- Alyse ¿Me puedes ayudar?- dijo mientras le daba un puño de hojas para que repartiera.
- Claro- respondió ella mientras se levantaba de su asiento y empezaba a repartir la hojas. Esas simples palabra habían echo que el corazón de Alyse se acelerara un poco. ¿Acaso Benjamin se acordaba de lo que había pasado entre ellos? ¿Acaso estaba tan borracho que toda la noche no había sido mas que una leve y borrosa fantasía? Alyse se hacia muchas preguntas en su cabeza mientras repartía las hojas. Pero claro, Benjamin recordaba esa noche muy bien lastimosamente, y al igual que ella no podía para de pensar en ello cada segundo de cada día, simplemente era algo imborrable.
Alyse puso el resto de hojas en su escritorio, luego se volvio a sentar y trato de concentrarse en la hoja, cosa que le costaba mucho ya que el profesor caminaba alrededor de toda la clase.
- Alyse- alguien tocaba su hombro. - ¿Te importaría quedarte un minuto después de clases? Necesito hablar contigo- el profesor se veía nervioso. Alyse tenia un nudo en la garganta.
-Claro- dijo Alyse casi sin voz. Alyse quería que eso pasar, pero estaba segura que era imposible, por lo tanto cuando paso se sorprendió mucho.
Alyse era una romántica irremediable, por lo tanto empezó a imaginarse muchas cosas, como por ejemplo que el profesor le dijera que la amaba y que la besara, aunque Alyse no se sentía atraida hacia el, bueno, el era guapo, simpático e inteligente, pero se negaba a sentirse atraída ya que eso traería muchos mas problemas de los que ya tenia.
Benjamin, por otro lado, tenia miedo, miedo de que algo saliera mal, miedo de que alguien se enterara de lo de Alyse, miedo a que su esposa se enterara de lo de Alyse. Benjamin nunca se había sentido tan extremadamente vulnerable. Esta chica que apenas conocía tenia su futuro en sus manos, desearía poder confiar en ella, pero lo único que conocía de ella era lo que mostraba en su clase. Era una chica encantadora, inteligente, sociable y sobretodo hermosa y no en un sentido sexual, simplemente era bella.
- Entonces ¿Que me quería decir?- pregunto Alyse cuando ya no había nadie en la clase. Benjamin movía su pie nerviosamente.
- Creo que tu sabes de lo que te quiero hablar- Alyse apretó fuertemente los libros que llevaba contra su pecho. Si, lo sabia.
- Tengo un vaga idea, pero dígamelo- se hizo la inocente.
-¿Halloween?- dijo entrecerrando los ojos un poco. En ese momento Alyse suspiro fuertemente y se relajo, iba a pasar, iban a hablarlo.
- Fue un error- dijo viendo hacia la ventana.- Y lo siento mucho, creo que fue mi culpa.
- No del todo, fue de los dos.- dijo mientras se sentaba encima del escritorio.- ¿Puedes prometerme algo, Alyse?
- ¿Que es?- pregunto Alyse poniéndose nerviosa de nuevo.
- Podrías no decirle lo que paso a nadie. Porque si lo haces traería muchos, muchos problemas- dijo remarcando la palabra "muchos".- Sobretodo para mi ya que lo hicimos esta prohibido, por si no sabias.
- Lo se- dijo Alyse impidiendo que siguiera. - Lo prometo, no se lo diré a nadie.- Benjamin no estaba del todo convencido. - Confía en mi, no soy chismosa y menos con algo que me dañaría a mi.- dijo tocando suavemente el brazo de Benjamin el cual asintió lentamente. Los dos se hundieron en un silencio incomodo, trataron de no compartir ninguna mirada para evitar mas incomodidad.- Es tarde y tengo entrenamiento con las animadoras.
- Si, si claro- dijo mientras se levantaba del escritorio y caminaba con ella hasta la puerta, se la abrió caballerosamente y le sonrió- Enserio te lo agradezco. Y lo siento mucho, Alyse.
- Como tu lo dijiste, fue culpa de los dos.- dijo saliendo del aula- Nos vemos la próxima clase- empezó a correr hacia el gimnasio rumbo a su entrenamiento.
- ¿Porque estas tan callada?- preguntó Spencer mientras conducía hacia el colegio de Leuven.
- Solo pienso- Alyse solo tenia una cosa en su mente desde Halloween, pero claro, no se lo podía decir a Spencer. Alyse lo miro y sonrió con amor, luego se acerco a a el y le dio un tierno beso en la mejilla. Se sentía demasiado mal por haberlo engañado, se sentía culpable, se sentía mala y sucia, aunque eso no quitaba que lo había disfrutado, lo había disfrutado mucho y eso la hacia sentirse peor.- Te quiero
Spencer la miro por unos segundos ya que no podía quitar su vista del camino, sonrió alegremente.
-Yo mas-
Alyse se sentía afortunada de tener a un hombre como Spencer a su lado, era un chico bueno, tierno, caballeroso, amigable, graciosos, respetuoso, atractivo, atlético y muchas muchas cosas mas. Spencer era uno de esos chicos casi perfectos que son muy difíciles de encontrar, esos que cumplen con todo lo que se pone en la lista del hombre perfecto. Aunque claro, nadie es perfecto, pero como novio Spencer lo era.
Llegaron al instituto, Spencer detuvo el auto en la entrada. Siempre dejaba a Alyse allí para que no llegara tarde esperando que el estacionara el auto. Alyse tomo su bolso y algunos libros que llevaba y abrió la puerta.
- Nos vemos en el almuerzo- dijo mientras le daba un rápido beso en los labios, luego salio apuradamente del auto y se encamino hacia su primera clase la cual era ingles irónicamente.
Alyse estaba nerviosa, No había visto a Benjamin desde esa noche, el profesor había faltado por una semana, Alyse no sabia el porque, pero lo suponía. Alyse no se acordaba mucho de la noche, todos sus recuerdos eran un poco borrosos, pero de lo que si se acordaba claramente era de lo que paso después. Ella y Benjamin se habían quedado dormidos en el piso, cuando Alyse se despertó se asusto ya que estaba desnuda junto a su profesor, por lo que rápidamente con mucho cuidado para no despertarlo se vistió con su disfraz de Halloween y se fue a su casa, por lo tanto no habían tenido la oportunidad de hablar sobrios del asunto. Con los que si había podido hablar era con sus padres, bueno, hablar era decir mucho ya que no la dejaron con todos sus gritos. Ellos estaban enojados, muy enojados, tanto que la habían castigado por lo que restaba del año, pero Alyse también estaba enojada, por lo que ellos habían echo, pero claro, como no la dejaron hablar no pudo reclamarles.
- Lo siento- dijo Alyse mientras entraba interrumpiendo la clase la cual acaba de comenzar.
- Pase- dijo el profesor Pollard evitando mirarla a los ojos.
Alyse paso y se sentó en el lugar de siempre , en la primera fila para poder poner atención, aunque en este momento eso era imposible, sin importar en que lugar se sentara.
- Bueno, primero que todo, quería disculparme por haber faltado esta semana.- dijo el mientras se recostaba contra su escritorio.
-¿Porque falto, profesor?- pregunto un alumna muy poco discreta. El profesor sonrió.
- Bueno, salí de la ciudad con mi esposa- Alyse sintió que se lo había dicho a ella, pudo ser paranoia, pero así lo sintió ella por lo tanto sintió un hueco en su estomago. Hasta ahora se daba cuenta de que gracias a ella Benjamin había engañado a su esposa, y eso no la hacia sentir mejor.- Pero, eso no importa. Bueno, supongo que hicieron su tarea y leyeron el libro que les deje como tarea ¿Cierto?- todos contestaron con un armonizado "Si". El profesor se estiro y saco del cajón del escritorio el libro "La letra escarlata". Alyse se inclino hacia su bolso y saco el mismo libro el cual ella no había tenido tiempo de leer, por lo tanto no sabia ni de que se trataba.
-Entonces, ¿quien me quiere decir de que se trata la historia?- normalmente Alyse seria la primera en levantar su mano, pero gracias su falta de tiempo para hacer la tarea tuvo que quedarse callada y mirar para otro lado para evitar que la escogieran.
- La historia se trata de una mujer que comete adulterio, por lo tanto es obligada a usar una letra "A" roja alrededor de su cuello como castigo.- dijo una chica que estaba sentada atrás.
- Exacto. La letra escarlata es una historia de la vergüenza y la humillación que le hacen pasar a una mujer, Hester Prynne, el personaje principal. Ella se embaraza y ya que hace mas de dos años que esta separada de su esposo todos creen que cometió adulterio, por lo tanto los magistrados la obligan a llevar una letra "a" escarlata en el canesú de su vestido para que todos sepan de su pecado.- explico rápidamente el profesor. Había una cierta ironía con esa historia y con la de Alyse y Benjamin. Una coincidencia muy rara que hizo que Alyse se sintiera mal.
Toda la clase se quedo callada, en espera de que el profesor siguiera. El suspiro.
- Les hice una pequeña guía y un resumen acerca de la historia, capitulo por capitulo, léanlo y luego responden las preguntas de la guía y la reviso la próxima clase.- El profesor saco un puño de hojas de su escritorio.- Alyse ¿Me puedes ayudar?- dijo mientras le daba un puño de hojas para que repartiera.
- Claro- respondió ella mientras se levantaba de su asiento y empezaba a repartir la hojas. Esas simples palabra habían echo que el corazón de Alyse se acelerara un poco. ¿Acaso Benjamin se acordaba de lo que había pasado entre ellos? ¿Acaso estaba tan borracho que toda la noche no había sido mas que una leve y borrosa fantasía? Alyse se hacia muchas preguntas en su cabeza mientras repartía las hojas. Pero claro, Benjamin recordaba esa noche muy bien lastimosamente, y al igual que ella no podía para de pensar en ello cada segundo de cada día, simplemente era algo imborrable.
Alyse puso el resto de hojas en su escritorio, luego se volvio a sentar y trato de concentrarse en la hoja, cosa que le costaba mucho ya que el profesor caminaba alrededor de toda la clase.
- Alyse- alguien tocaba su hombro. - ¿Te importaría quedarte un minuto después de clases? Necesito hablar contigo- el profesor se veía nervioso. Alyse tenia un nudo en la garganta.
-Claro- dijo Alyse casi sin voz. Alyse quería que eso pasar, pero estaba segura que era imposible, por lo tanto cuando paso se sorprendió mucho.
Alyse era una romántica irremediable, por lo tanto empezó a imaginarse muchas cosas, como por ejemplo que el profesor le dijera que la amaba y que la besara, aunque Alyse no se sentía atraida hacia el, bueno, el era guapo, simpático e inteligente, pero se negaba a sentirse atraída ya que eso traería muchos mas problemas de los que ya tenia.
Benjamin, por otro lado, tenia miedo, miedo de que algo saliera mal, miedo de que alguien se enterara de lo de Alyse, miedo a que su esposa se enterara de lo de Alyse. Benjamin nunca se había sentido tan extremadamente vulnerable. Esta chica que apenas conocía tenia su futuro en sus manos, desearía poder confiar en ella, pero lo único que conocía de ella era lo que mostraba en su clase. Era una chica encantadora, inteligente, sociable y sobretodo hermosa y no en un sentido sexual, simplemente era bella.
- Entonces ¿Que me quería decir?- pregunto Alyse cuando ya no había nadie en la clase. Benjamin movía su pie nerviosamente.
- Creo que tu sabes de lo que te quiero hablar- Alyse apretó fuertemente los libros que llevaba contra su pecho. Si, lo sabia.
- Tengo un vaga idea, pero dígamelo- se hizo la inocente.
-¿Halloween?- dijo entrecerrando los ojos un poco. En ese momento Alyse suspiro fuertemente y se relajo, iba a pasar, iban a hablarlo.
- Fue un error- dijo viendo hacia la ventana.- Y lo siento mucho, creo que fue mi culpa.
- No del todo, fue de los dos.- dijo mientras se sentaba encima del escritorio.- ¿Puedes prometerme algo, Alyse?
- ¿Que es?- pregunto Alyse poniéndose nerviosa de nuevo.
- Podrías no decirle lo que paso a nadie. Porque si lo haces traería muchos, muchos problemas- dijo remarcando la palabra "muchos".- Sobretodo para mi ya que lo hicimos esta prohibido, por si no sabias.
- Lo se- dijo Alyse impidiendo que siguiera. - Lo prometo, no se lo diré a nadie.- Benjamin no estaba del todo convencido. - Confía en mi, no soy chismosa y menos con algo que me dañaría a mi.- dijo tocando suavemente el brazo de Benjamin el cual asintió lentamente. Los dos se hundieron en un silencio incomodo, trataron de no compartir ninguna mirada para evitar mas incomodidad.- Es tarde y tengo entrenamiento con las animadoras.
- Si, si claro- dijo mientras se levantaba del escritorio y caminaba con ella hasta la puerta, se la abrió caballerosamente y le sonrió- Enserio te lo agradezco. Y lo siento mucho, Alyse.
- Como tu lo dijiste, fue culpa de los dos.- dijo saliendo del aula- Nos vemos la próxima clase- empezó a correr hacia el gimnasio rumbo a su entrenamiento.
3 comentarios:
Joooooooooodeeeer. De todos los libros, tenía que ser "Scarlett Letter" ¡Yo lo leí en clase de Inglés también! Por supuesto en Inglés. Pero, por cierto, eso no lo entiendo. ¿Es profesor de Inglés, de Literatura o qué? ¡Igual, qué grosero! "No le digas a nadie, me traerá problemas" ¡Y a ver! ¿No le importa un comino cómo se siente ella? Hombres. Te usan y te botan. Todos son iguales. XD
Attt: S@r!t@.
¿Puedo matar a Alyse? Digo, si el novio era tan bueno... me da lástima Spencer D: Hm... me suena a que tienen que terminar juntos Benjamín y Alyse... sino, los obligo!! XD
Me gusta mucho~ aunque me da un poquito de tristeza >.< Pobre la esposa de Benji D: (le puedo decir así? XD)
Seguí así, que esto se pone de lo más interesante!
PD: entiendo a Alyse con lo de los padres u.u
D:
Ese lirbo es bastante bueno .___.
porque justamente ese?!
pero bueno igual tengo que avanzar rapido antes de que mi madre me apague el modem(:
Publicar un comentario